El papel del interruptor de aislamiento
Las funciones principales del interruptor aislador son aislar la fuente de alimentación, realizar operaciones de conmutación y conectar o desconectar circuitos de baja corriente.
Aislar la fuente de alimentación: Aísla de forma fiable los equipos o líneas eléctricas que requieren reparación de la red eléctrica energizada para garantizar la seguridad del personal de mantenimiento. Esta es la función más básica e importante del seccionador. Durante el mantenimiento, al accionarlo, se puede crear un punto de desconexión visible, de modo que el equipo eléctrico quede completamente aislado de la fuente de alimentación, evitando así el paso de corriente y garantizando la seguridad del personal de mantenimiento.
Operación de conmutación: En un circuito de doble barra, el seccionador también puede utilizarse para la operación de conmutación, es decir, para conmutar el equipo eléctrico o la línea de alimentación de un conjunto de barras a otro para cambiar el modo de operación. Esta operación es muy común en los sistemas de energía y se utiliza para ajustar el modo de operación del sistema y mejorar su flexibilidad y confiabilidad.
Conectar o desconectar circuitos de baja corriente: Aunque el seccionador no tiene capacidad de extinción de arcos eléctricos y no puede utilizarse para cortar grandes corrientes de carga ni de cortocircuito, sí puede utilizarse para conectar o desconectar circuitos cuando la corriente es muy baja y la capacidad es muy baja. Esta función también tiene ciertas aplicaciones en sistemas eléctricos, como la apertura y el cierre de barras colectoras sin carga y equipos conectados directamente a ellas para un funcionamiento sin problemas.
En resumen, los seccionadores juegan un papel vital en los sistemas de energía y son uno de los dispositivos importantes para garantizar el funcionamiento seguro de los sistemas de energía.